Ícono de San Ambrosio, icono ortodoxo griego hecho a mano de San Ambrosio de Milán, icono de placa de madera para colgar en la pared, decoración religiosa.

Este maravilloso icono se creó mediante la técnica de la litografía y cuenta con un doble barniz para garantizar su impermeabilidad y durabilidad. Su creador aprendió la canonización de la iconografía en los talleres de los Monasterios del Monte Athos, donde aprendió tanto la técnica de la litografía como el proceso de envejecimiento artificial artesanal.

Nuestro padre entre los santos, Ambrosio de Milán, llegó a ser obispo de Milán como el único candidato competente para suceder a Auxencio, obispo de convicción arriana, en 374. Catecúmeno y abogado de formación, aprendió teología mediante un intenso estudio de la materia, siendo sucesivamente bautizado y consagrado obispo de Milán. Se mantuvo fiel a la creencia nicena y, mediante la elocuencia de sus argumentos, persuadió al emperador Graciano a aceptar la confesión nicena. Posteriormente, persuadió a Graciano para que convocara un concilio local, en 381, en Aquilea, que depuso a los obispos arrianos Paladio y Secundiano de sus cargos episcopales, fortaleciendo así la posición ortodoxa en Occidente. Ambrosio combatió con celo los intentos de la corte imperial de favorecer a los partidos arrianos, la "vieja" religión y los judíos, oponiéndose en particular a los favores del emperador Valentiniano, quien apoyaba a los arrianos. En su defensa de la postura ortodoxa, se le ha comparado a menudo con san Hilario de Poitiers. Fue conocido por sus sermones, que influyeron enormemente en la conversión de Agustín de Hipona. Su festividad se celebra el 7 de diciembre.

Se puede colocar sobre una superficie plana o colgar en una pared.

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