Este icono bizantino es una litografía con doble capa de barniz para garantizar colores vivos y propiedades impermeables que representan a los 40 santos mártires de Tracia en una obra de arte inspirada en Dios que respeta la técnica atoniana que le da a este icono un valor religioso y estético único.
Las Santas Cuarenta Vírgenes Mártires, junto con su maestro, el diácono Amón, fueron capturadas por el gobernador Baudos y torturadas por negarse a ofrecer sacrificios a los ídolos. Las santas mártires soportaron crueles tormentos, con el fin de obligarlas a renunciar a Cristo y adorar ídolos. Posteriormente, fueron enviadas a Heraclea, en Tracia, para comparecer ante el tirano Licinio. Sin embargo, las valientes mártires se mantuvieron firmes. San Amón y ocho de las vírgenes fueron decapitadas, diez vírgenes fueron quemadas, seis de ellas murieron tras serles introducidas bolas de metal candentes en la boca, seis fueron apuñaladas con cuchillos y las demás fueron golpeadas en la boca y apuñaladas en el corazón con espadas.
Santas 40 vírgenes mártires y su maestro el Hieromártir Ammón el Diácono en Heraclea en Tracia: Adamantina, Atenea, Akrive, Antígona, Arivea, Aspasia, Afrodita, Dione, Dodone, Elpinike, Erasmia, Erato, Ermeneia, Evterpe, Thaleia, Theanoe, Theano, Theonymphe, Theophane, Kalliroe, Kalliste, Kleio, Kleonike, Kleopatra, Koralia, Lambro, Margarita, Marianthe, Melpomene, Moscho, Ourania, Pandora, Penélope, Polymnia, Polynike, Sapfo, Terpsícore, Troada, Haido y Harikleia.
Se puede colgar en una pared o colocar sobre una superficie plana.
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